Minutos después de que el presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, decretó la “muerte cruzada”, y con ello disolvió el Parlamento y convocó a elecciones legislativas y presidenciales, el exmandatario Rafael Correa criticó la decisión del Ejecutivo.
En un trino, Correa catalogó la decisión de “ilegal” y afirmó que “obviamente no hay ninguna conmoción interna”, como argumentó el mandatario. “En todo caso, es la gran oportunidad para mandar a la casa a Lasso, su Gobierno y sus legisladores de alquiler”, agregó.
En otro tuit, el exmandatario tildó de “triste retroceso democrático” el anuncio del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y Policía de declarar constitucional decreto de Lasso.
Correa considera que el hecho de que ofrezcan declaraciones sobre la crisis política que atraviesa el país “demuestra que aún no entienden su rol en democracia”.