NACIONAL

52.7 % del gasto se destina a medicamentos

Para la organización Cero Desabasto, los medicamentos antiinflamatorios se incrementaron 7.14 %, los tratamientos para la diabetes 6.77 % y los antigripales 6.57 %, en comparación con 2024.

A esto se suma que 52.7 % del gasto de bolsillo en salud se destina exclusivamente a medicamentos.

Es decir, la inflación médica en México continúa creciendo por encima de la inflación general, impactando directamente el acceso a medicamentos y tratamientos esenciales a lo que se suman problemáticas como la falta de transparencia en el sector público, expuso la asociación civil Soy Paciente.

“En 2025, la inflación en medicamentos en México ha continuado al alza, superando a la inflación general del país”, alertó Frida Romay Hidalgo, vocera de Cero Desabasto.

Durante su intervención, Romay compartió datos mencionados sobre el aumento en los precios de los medicamentos y su impacto en el gasto de las personas

“El incremento en los costos puede llevar a que los pacientes suspendan sus tratamientos o busquen alternativas menos efectivas, deteriorando su salud y aumentando la carga sobre el sistema de salud”, explicó.

Las proyecciones para 2025 son aún más preocupantes, pues México podría alcanzar una inflación médica de 14.9 %, una de las más altas de Latinoamérica, donde el promedio estimado es de 10.1 %, según datos de WTW.

En el contexto del webinar “Acceso a la Salud y Transparencia”, organizado por la asociación, expertas coincidieron en que la falta de información clara y oportuna agudiza las desigualdades en el sistema de salud.

Desde hace más de una década, el porcentaje de la población sin seguridad social atendida en el sector privado ambulatorio creció de 31 a 60 entre 2012 y 2022, mientras que la población derechohabiente del IMSS usuaria de los servicios privados creció de 31 % a 34 % y la del ISSSTE de 28 % a 41 % en el mismo periodo.

Estas cifras revelan la menor capacidad resolutiva de los servicios públicos de salud para atender las necesidades de la población sin seguridad social.

El recorte presupuestal a los servicios públicos de salud de 11 % en 2025 presagia una mayor privatización en la atención ambulatoria.

A pesar de su considerable crecimiento, esta privatización no ha sido ni rigurosa ni suficientemente abordada. Por ello se denomina como silenciosa, pues cada vez es mayor el dinero que la población tiene que destinar a la salud.

De acuerdo con investigaciones particulares, el gasto de bolsillo en salud después de un descenso sostenido entre 2002 y 2013, aumentó hasta llegar a 41 % en 2021, una de las cifras más altas de los sistemas de salud latinoamericanos.

Si se compara, por ejemplo, con Colombia, Costa Rica y Chile presentan porcentajes mucho menores de 15.1 y 22.4, respectivamente.

Esto obedece, en gran medida a la falta de capacidad de los servicios públicos de salud para responder a la demanda de atención. Situación que sigue siendo ignorada en el recientemente publicado Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030.

Similar Posts

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *