Investigaciones especiales/Raúl Ruiz-Roberto Meléndez
Se da a conocer la verdad de los hechos, a más de dos semanas de la detención del número 1 de los “barones de la droga mexicanos”, Ismael “El Mayo” Zambada García (el señor del sombrero), junto con Joaquín Guzmán López (uno de “Los Chapitos”), situación similar sucedió con la misteriosa desaparición del segundo en el organigrama criminal, Juan José Esparragoza Moreno, alias “El Azul”, pues no se supo de su paradero. Y la detención y extradición del tercero de a bordo, Joaquín Archivaldo Guzmán Loera “El Chapo”.
De acuerdo con investigaciones especiales del equipo de reporteros de unomásuno, y de información proporcionada por oriundos del estado de Sinaloa, señalaron que el “capo de capos”, Ismael Zambada García, observando con preocupación el riesgo de perder los miles de millones de dólares generados por sus ilícitas actividades, se dio a la tarea de diseñar un “pacto”, “convenio” o “acuerdo”, con las autoridades estadounidenses, con la finalidad de obtener beneficios (para él y los integrantes de familia) y con ello conservar alguna parte de su riqueza. Tal decisión se comprende por la justificada desconfianza del “capo”, para con las autoridades mexicanas.
Lógico es que dicho “pacto”, dejó pasmado al sistema político mexicano, al gobierno en el poder y al mismo presidente Andrés Manuel López Obrador, pues jamás imaginaron y dieron cuenta que la DEA (Departament Enforcenment Drugs) tenía ya casi 6 meses trabajando el asunto de costa a costa y de frontera a frontera de la república mexicana, cuestión que los inútiles “Servicios de inteligencia mexicanos”, nunca pudieron detectar.
La cuestión es que a la fecha, los americanos interrogaron ya a “El Mayo”, a cambio de prebendas y cierta protección, y lo obligaron a revelar lo que no se sabía en lo referente a rutas, nombres, conexiones, montos, cifras, cuentas, etcétera, así como lo más importante; los miles de millones de dólares con que el Cártel de Sinaloa ha financiado las campañas de políticos en 2006, 2012, 2018 y 2024. El golpe mediático americano fue certero y estaba dando en el centro neurálgico del corazón del sistema político mexicano.
En ese contexto cuestionaron, ¿se preguntarán, bueno, y en todo esto qué tiene que ver el hijo de “El Chapo”, también capturado?, pues resulta que para las leyes americanas las declaraciones o confesiones de un testigo o criminal pierden peso jurídico cuando este muere en cualquier circunstancia y pues como “El Mayo” Zambada García, está en verdad ya muy deteriorado de la salud por lo que en todas sus confesiones ha estado presente el hijo de “El Chapo”.
Si se les muere uno, ahí tendrán al otro del mismo cártel, la misma familia y muy joven.
