En fallida emboscada a comando de la Guardia Nacional, elementos de esta corporación policial abatieron a cuatro sicarios en el municipio de Villaflores, Chiapas, donde a pesar de la “elevada presencia” a efectivos de las Fuerzas Federales, los enfrentamientos entre empresas de la delincuencia organizada y estas con autoridades de los tres niveles de gobierno continúan, al tiempo que centenares de pobladores abandonan sus lugares de residencia ante el temor de perder la vida.
Reportes de autoridades estatales y federales refieren que el ataque armado contra los servidores públicos se registró por la noche del sábado 21 del presente mes en el municipio referido, donde los guardianes del orden y la seguridad realizaban operativos de vigilancia. Hechos en los que se reportaron dos oficiales heridos.
De acuerdo con las investigaciones, los cuatro sicarios que perdieron la vida en la fallida emboscada viajaban en una camioneta, color rojo, donde quedaron sus cuerpos. En la zona de la tragedia fue encontrada una gorra con las siglas CCYG, por lo que se presume pertenecían al llamado Cártel Chiapas y Guatemala, el que se ha sumado al resto de empresas criminales que operan en el sureño estado, en el que miles de sus habitantes han sido desplazados.
Por lo que hace a los dos guardias nacionales lesionados por disparo de arma de fuego, la corporación reportó que fueron llevados, en primera instancia a un hospital de Villaflores, pero que debido a la gravedad de las hedidas fueron trasladados a un nosocomio de Tuxtla Gutiérrez, donde un grupo de médicos luchan por preservarles la vida.
Los dos lesionados, se puntualizó, son vigilados por otros oficiales de la corporación, en tanto que autoridades policiales y ministeriales realizan las investigaciones de los hechos a efecto de integrar la carpeta correspondiente. Partidas de militares y de la propia Guardia Nacional efectúan recorridos en el municipio referido y aledaños en busca de los cómplices de los fallecidos, quienes continúan en calidad de desconocidos.