Camuflados con un cargamento de dulces, botellas de tequila y chiles, entre otros artículos, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, comisionados en el estado de Durango, descubrieron y decomisaron más de 300 kilos de cocaína que eran trasportados en un tráiler. Se estima que el alcaloide iba a ser llevado, para su venta y consumo, a Estados Unidos. El operador del automotor fue detenido.
De acuerdo con reportes de la Fiscalía General de la República, los efectivos militares detuvieron, en el municipio de Cuencamé, a Diego “L”, quien conducía la pesada unidad en la que transportaba 308 kilos de cocaína, la que se había distribuido en 250 “ladrillos”.
El alcaloide, confirmaron las autoridades ministeriales de la Federación, había sido colocado estratégicamente debajo de cajas con botellas de tequila, dulces de coco, croquetas para perros y gatos, chiles y otros alimentos, los que forman parte de la carpeta de investigación.
Se precisó que las acciones se registraron en la carretera federal, a la altura de la comunidad de San Pedro Ocuila, y que el operador del tráiler, el que se encontraba estacionado, al percatarse de la presencia de los militares, intentó darse a la fuga, los que fue impedido por elementos de la Sedena.
“Diego “L”, indicó a la representación social Federal que había salido del estado de Jalisco y se dirigía a la ciudad de Tijuana, Baja California, donde se estima entregaría los más de 300 kilos de cocaína, los que posteriormente serían ingresados a la Unión Americana.
Personal de la Agencia de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la República realiza investigaciones tanto en Jalisco como en Durango y Baja California a efecto de deslindar responsabilidades, en tanto que el Ministerio Público de la Federación integra ya la carpeta de investigación. Por lo que hace al chofer del tráiler, este será consignado ante autoridades jurisdiccionales, las que determinarán su situación jurídica.
