En sesión plenaria celebrada el miércoles 2 de abril, la Cámara de Diputados del Estado de México aprobó de manera oficial declarar el 11 de septiembre como el Día Estatal del Rock, gracias a la iniciativa presentada por la diputada Carmen de la Rosa Mendoza.
La propuesta reconoce al rock como una expresión cultural fundamental en la construcción de la identidad mexiquense y como parte de la lucha social de varias generaciones de jóvenes.
La iniciativa, respaldada por el Grupo Parlamentario de Morena, subraya el valor histórico del género, desde sus orígenes en el país durante la segunda mitad del siglo XX hasta su consolidación en espacios alternativos como los «hoyos funky» de municipios como Nezahualcóyotl, Ecatepec y Naucalpan, donde el rock resistió décadas de censura, represión y marginación institucional.
El decreto también considera el impacto económico y cultural de este movimiento, así como su vigencia en la actualidad a través de nuevas generaciones de músicos, sonideros y promotores.
Este avance legislativo no hubiera sido posible sin el respaldo activo de representantes clave del movimiento rockero y sonidero del oriente del Estado de México, guardianes de una tradición que ha mantenido viva la llama del rock urbano desde las calles y los escenarios alternativos.
Entre los participantes destacan: Rojas y Miguelón de Los Mierdas Punk; Kike de Los Warriors; Arturo de Sonido Ilusión; El Gallo de Sonido Alto Voltaje; Juan del grupo Rockwailers; Toño del Tianguis Cultural; Rommel de Sonido Carita JC; José Luis Sánchez el Chocorrol, representante del colectivo Rocker Unidos por el Rock and Roll.
La elección del 11 de septiembre no es fortuita: conmemora la realización del histórico Festival Rock y Ruedas de Avándaro, efectuado en 1971 en Valle de Bravo, considerado el primer evento multitudinario del rock mexicano. Aquel encuentro marcó un antes y un después en la historia musical del país, al convocar a miles de jóvenes en un acto de expresión libre, frente a un contexto de represión política y censura cultural.
Además de la declaración oficial, la ley contempla la realización de conciertos, festivales y actividades educativas que promuevan la memoria histórica del rock en el Estado de México, el apoyo a bandas locales y la inclusión del género en programas escolares.
También se impulsará la creación de archivos sonoros y audiovisuales que resguarden la riqueza de este legado.
Con esta aprobación, el Estado de México se convierte en pionero al reconocer institucionalmente el papel del rock como parte del patrimonio cultural, social y político de sus comunidades. A partir de ahora, cada 11 de septiembre será una fecha para celebrar la resistencia, creatividad y rebeldía que han caracterizado al rock estatal, desde los barrios hasta los escenarios.
