Argentina se perfila como la única opción de FIFA para organizar el Mundial Sub-20 luego que el miércoles el organismo le arrebató a Indonesia la sede del certamen por disputas políticas.
El propio presidente de FIFA Gianni Infantino reconoció las posibilidades que tiene el país sudamericano —reciente campeón de la Copa Mundial en Qatar— de convertirse en el nuevo anfitrión de la competencia juvenil durante una rueda de prensa que ofreció el jueves en Asunción de Paraguay antes de asistir como invitado al congreso de CONMEBOL.
Durante un encuentro previo, Infantino recibió en manos del presidente de CONMEBOL, Alejandro Domínguez, una propuesta formal de parte de la Asociación del Futbol Argentino (AFA), con el aval del gobierno argentino para organizar el campeonato juvenil que se disputará del 20 de mayo al 11 de junio.
El dirigente aclaró que la decisión “se tomará en dos o tres días” y deberá ser avalada por la junta directiva de FIFA, integrada por los presidentes de todas las confederaciones.
Indonesia, la sede original, fue despojada de albergar el certamen pocos días antes del sorteo en medio de la agitación política por la participación de Israel.
Como la nación con mayor población musulmana del mundo, Indonesia no tiene relaciones diplomáticas formales con Israel y apoya públicamente la causa palestina.
Si Argentina es finalmente confirmada como sede, se ganará el derecho de disputar al Mundial Sub-20 al cual no se había clasificado en un reciente certamen sudamericano.
Argentina ya organizó el Mundial Sub-20 en 2001, cuando fue campeón. La Albiceleste fue imbatible en la categoría hasta 2007, cuando ganó por última vez la competencia con Sergio Agüero y Ángel Di María como figuras. Le siguió un período de malos resultados y cambios constantes de entrenador.
En el último torneo sudamericano de eliminatoria la Albiceleste conducida por el exfutbolista Javier Mascherano ni siquiera clasificó al hexagonal final. Luego el técnico presentó la renuncia y el puesto está vacante.
Si finalmente Argentina obtiene la sede del torneo juvenil, se prevé el apoyo del público argentino en medio de la euforia por los colores albicelestes luego que el astro Lionel Messi levantara la tercera Copa del Mundo para el país hace tres meses en Qatar.