Por Karina A. Rocha Priego
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¿Con qué fin las autoridades federales pierden el tiempo desviando la atención de la población hacia figuras políticas y actos cometidos en el pasado? Porque México ya se dio cuenta que las intenciones del Gobierno Federal es “confundir” y desviar la atención de la población de la realidad que se está viviendo en este país.
Lo más triste es que el intelecto de las flamantes autoridades federales no da para más, sino es atacar a expresidentes de México. Primero se fueron a la yugular de Felipe Calderón, lo denostaron, criticaron y victimizaron hasta más no poder, pero no les resultó muy contundente o se aburrieron. A Vicente Fox no pudieron atacarlo mucho, la realidad es que la facilidad de defensa del expresidente Fox, los dejó callados más de una vez, pero hoy, queridos lectores, como marabunta se han ido contra el expresidente Ernesto Zedillo.
Seguramente, se están valiendo de la información que se resguardaba en el Cisen (Centro de Investigación y Seguridad Nacional), información que data desde 1920, o sea, tenía un siglo y cinco años de antigüedad pero, a la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de México, seguramente en un afán de “desaparecer” sus propios archivos, que no eran nada gratos para la historia de este país, es que dejó de existir ese centro pero, sólo para el resto de los mexicanos, porque los archivos existen y hacen de ellos lo que a los morenistas se les pega la gana.
Seguramente de ahí se ha colgado la presente administración federal para atacar a Ernesto Zedillo, con casos como el Fobaproa, el cual, si no se hubiera llevado a cabo, México seguiría sumergido en la peor de las crisis económicas de la historia de este país.
Seguro este gobierno no lo entiende, pues tendría que ser demasiado letrado y preparado para comprenderlo; sin embargo, llama más la atención que hayan “omitido” que el impulsor, creador, del Fobaproa fue el expresidente Carlos Salinas de Gortari y no Ernesto Zedillo, este sólo lo puso en práctica, pues fue durante el cambio de sexenio.
Para quienes no lo recuerden o no lo hayan vivido, el Fobaproa, o sea Fondo Bancario de Protección al Ahorro, fue un fondo de contingencia creado en 1990 por el gobierno mexicano en conjunto con casi la totalidad de los partidos políticos en aquel entonces, excepto el PRD, a fin de enfrentar posibles problemas financieros extraordinarios, cuyo propósito inicial era evitar el colapso total del sistema financiero mexicano. Cuando un banco tenía problemas de liquidez, el fondo compraba su cartera vencida, es decir, préstamos que ya no podían cobrarse, o inyectaba dinero para que la institución pudiera seguir operando. Eso, queridos lectores, sucedió hace 35 años.
Hoy, pretenden despertar este evento, acusando a Ernesto Zedillo de esa “solucion económica para México”, pero insisto, fue creado por Carlos Salinas y Zedillo, un economista brillante, sólo lo puso en marcha, evitando una hecatombe financiera en México, lo cual, estoy cierta, ¡por supuesto que no se les ocurriría en la administración actual!, por el contrario, lo que ha hecho en los últimos seis años y meses, ha sido destruir a México y sumirlo en la miseria, además de en-deudarlo por los siguientes cien años.
Se ha vuelto una costumbre que el Gobierno Federal en turno, se cuelgue de algún expresidente de México para tapar su incompetencia para dirigir a un país con más de 130 millones de mexicanos.
Nos ha llamado la atención que estos morenistas, han atacado a Vicente Fox por sus políticas económicas que, supuestamente, sólo beneficiaron a los sectores más ricos, pero no dicen que, entonces, “todos ganaban”, no como sucede actualmente.
Criticaron sus políticas sociales y su relación con Estados Unidos, esa que, actualmente, pende de un hilo y con la cual, los más perjudicados son los mexicanos.
A Felipe Calderón, Andrés Manuel López Obra-dor lo traía a “pan y agua”, criticando severamente su guerra contra el narcotráfico, lo cual no se hizo durante el lopezobradorismo ni ahora con su sucesora.
Es más, hoy se sigue protegiendo a las células delictivas dedicadas al narcotráfico, dicen, por aquello de “los recursos económicos que aún reciben”.
También lo acusaron de corrupción y nepotismo, pero de críticas y siembra de odio no pasó.
Hoy, la novedad es Ernesto Zedillo por el Foba-proa, de lo cual, el expresidente se ha defendido. Un caso de hace 35 años que, honestamente, ya caducó pero, si nos vamos a analizar que pasó en cada sexenio, primero tenemos que decir:
¿Con qué calidad moral la administración presidencial de Andrés Manuel López Obrador y actualmente la de Claudia Sheinbaum, pueden señalar, acusar y enjuiciar a sus antecesores? ¿En verdad creen que lo han hecho mejor? O, ¿cuál es realmente el fin, tapar su incompetencia acusando a otros?
Lo más raro o, mejor dicho, lo más “conveniente” para este par de administraciones morenistas es que siempre omiten hablar, señalar y acusar al tristemente célebre expresidente Enrique Peña Nieto. ¿Por qué? Estarán de acuerdo en que esa es la prueba más fehaciente de que, el trato en “lo oscurito” por la Presidencia de México del que tanto se ha hablado, es real, como real fue que Alejandra del Moral “se vendiera de mujer ‘VALIENTE’ como mujer ‘BARATA’” a Morena y el exgobernador Alfredo del Mazo Maza, se sometiera a los mandatos de López Obrador.
Pero, si mal no recuerdo, en campaña, el “mejor cliente” de López Obrador fue Enrique Peña y compinches, luego… el silencio. Nadie podía ni puede tocar a “Jimmy Neutrón”, so “amenaza de cárcel” a quien se atreva a tocar al traidor a la patria.
Sí, sí, de eso acusaba AMLO a Peña Nieto, de ¡traidor a la patria!, de saqueador, de cohecho, de delincuente electoral; lo acusaba de haber hecho uso de recursos ilícitos para financiar su campaña a la Presidencia de México; le achacó una y otra vez el caso Odebrecht; de complicidad con Emilio Lozoya para “ordeñar a su antojo” los recursos de Pemex; la desaparición de los 43 normalistas; la ‘Estafa Maestra’, a través de la cual, 11 dependencias usaron 128 empresas ‘fantasma’ para desaparecer 7,760 millones de pesos, lo que llevó a Rosario Robles a la cárcel, por cierto.
En fin, la ola de corruptelas que envuelven a Peña Nieto, van más allá de lo que hayan hecho Fox, Calderón y Zedillo juntos. Es más, se dice que la administración de Peña Nieto fue la más corrupta de toda la historia de México -antes de la de López Obrador- y, ¿omiten hablar de ese expresidente? ¿Como por qué? ¿Por qué les regaló la Presidencia de México? ¿Por qué hoy se ha convertido en un aliado? ¿Acaso perdieron la memoria los morenistas? ¿Será que, gracias a ello, el “nuevo PRI” hoy es Morena?.
Lo cierto es que mal se vio, mal se ve y mal se seguirá viendo la protección que los morenistas otorgan diariamente al expresidente Peña Nieto cuando a este, debería investigársele hasta por el Ferrari Testarossa que le fue regalado durante su administración como presidente y que se encuentra “oculto” en una enorme caja de madera en algún lugar del Valle de Toluca (sic); debería investigarse a toda la gente que le apoyó en sus fechorías y hoy vive la gran vida; la desaparición de obras de arte de Los Pinos, hasta el cómo “planearon” entregar la Presidencia de México a López Obrador y a Morena.
Total, si lo que quiere este gobierno es “distraer” a la población, entréguenle “chismes más recientes” y no de casos ocurridos hace más de 35 años como el Fobaproa, pues lo único que demuestran es desesperación porque los mexicanos “cautivos”, no empiecen a darse cuenta de la realidad que les están “obligando” a vivir…