Gobernado por quien fuera secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de la Federación, Alfonso Durazo Montaño, personal de la Guardia Nacional, comisionado en Sonora, decomisó, en Caborca, aditamentos utilizados para lanzar explosivos con drones, armas de fuero de grueso calibre y otros instrumentos bélicos, los que se suman a los 10 fusiles militares, decenas de cargadores y miles de cartuchos útiles en Sonoyta, acciones en las que también se aseguraron vehículos utilizados para la comisión de hechos delictivos.
Reportes de la corporación policial en cometo precisan que efectivos de la misma, al realizar labores de vigilancia y seguridad en brechas y caminos de terracería de Caborca se percataron que varios vehículos habían sido supuestamente abandonados en la comunidad de El Arenoso, por lo que iniciaron una minuciosa inspección.
Como resultado de lo anterior, los servidores públicos localizaron en diversos puntos de los automotores 23 aditamentos para lanzar explosivos desde drones, un cañón de fusil, tres armas largas y 17 cargadores, además de cartuchos útiles, instrumentos que fueron puestos a disposición del Ministerio Público Federal para los efectos correspondientes.
Se precisó que son ocho los vehículos asegurados por las autoridades federales, uno de ellos blindado y otro con reporte de robo, sin que se registraran detenciones, por lo que las investigaciones y operativos para localizar y detener a los presuntos responsables continúan.
Las autoridades destacaron que lo anterior se suma al decomiso que hace unos días se registró en el municipio de Sonoyta, donde se decomisaron a la delincuencia organizada una decena de fusiles de asalto, miles de cartuchos hábiles, vehículos, cargadores y otros instrumentos de delito, los que fueron entregados a la Fiscalía General de la República, en la que se integran las carpetas de investigación a efecto de deslindar responsabilidades.
Se estima que los automotores, armas de fuego, cartuchos y equipo para lanzar explosivos desde drones podrían pertenecer a las organizaciones delictiva de “Los Chapitos” y “Los Mayitos”, quienes a sangre y fuego se disputan el control no sólo de Sonora y Sinaloa, sino de otras entidades federativas, entre las que destaca Chiapas.