Juan Miguel “N”, alias Pajarraco, presunto miembro de la organización criminal Guerreros Unidos, fue capturado por fuerzas federales en el municipio de Almoloya, Hidalgo. Su aprehensión se realizó el martes 3 de junio mediante un operativo en la colonia Centro, tras labores de inteligencia coordinadas por autoridades federales.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) confirmó que el detenido está vinculado a los delitos de delincuencia organizada y desaparición forzada, relacionados con uno de los crímenes más atroces en la historia reciente del país: la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, ocurrida en septiembre de 2014.
“El detenido está vinculado con el caso de Ayotzinapa ocurrido en 2014”, señaló la SSPC en su comunicado oficial.
De acuerdo con los registros oficiales, Pajarraco formaba parte del grupo delictivo que tuvo un papel central en la desaparición de los normalistas de la escuela “Raúl Isidro Burgos”, ubicada en Tixtla, Guerrero. Según investigaciones previas, Guerreros Unidos utilizaba autobuses para el trasiego de droga hacia Estados Unidos, particularmente a Chicago, lo que habría desatado la respuesta violenta contra los estudiantes la noche del 26 de septiembre de 2014.
“Integrantes de ‘Guerreros Unidos’ dieron órdenes para que estuvieran alertas de lo que estaba sucediendo”, se detalla en el segundo informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa.
Mientras se anunciaba la detención de uno de los presuntos operadores del grupo criminal, también se confirmó la absolución definitiva de José Luis Abarca, exalcalde de Iguala, por el delito de secuestro agravado en agravio de los 43 normalistas. El fallo fue ratificado por el Segundo Tribunal Colegiado del Decimonoveno Circuito de Tamaulipas, que negó el amparo solicitado por los familiares de las víctimas.
Aunque fue absuelto en este proceso, Abarca no saldrá en libertad, ya que cumple otras condenas: una por secuestro agravado de seis activistas, incluida la del líder campesino Arturo Hernández Cardona, y otra por el asesinato del síndico municipal Justino Carbajal Salgado en 2013. Actualmente, se encuentra recluido en el penal federal número 18 de Ramos Arizpe, Coahuila, adonde fue trasladado el pasado 30 de abril.