Ernesto Armendáriz Ramírez, delegado en el Estado de México de Programas para el Bienestar, informó que el programa “Salud Casa por Casa” ha superado su meta de reclutamiento para médicos y enfermeras en la entidad, lo cual dijo, permitirá que los mexiquenses puedan acceder a consultas hasta sus domicilios.
En este sentido, Armendáriz Ramírez, destacó que, hasta el momento la delegación de Programas para el Bienestar en la entidad ha reportado más de 6 mil doctores y enfermeras inscritos al programa federal de atención domiciliaria en el Estado, por lo que abundó que una vez que concluya el registro se iniciará el proceso de selección, para que en enero del 2025 se contrate a los finalistas, mismos que serán capacitados y en febrero comiencen a dar consultas en los diferentes municpios.
“Es una excelente cobertura, es decir, están los registros de manera adecuada en todo el territorio del Estado de México, por lo que creemos que hasta el momento no solamente no ha habido ningún problema, sino que vamos bastante bien, vamos a poder cumplir en tiempo y forma”, indicó.
Sin embargo, el delegado del Bienestar, aseveró que la selección de médicos y enfermeras se basará en dos criterios, uno, es que las y los aspirantes cuenten con título en dichas áreas y dos que principalmente tengan disponibilidad de acudir a las zonas más alejadas de la entidad, lo cual considera que no será un problema.
“Es muy normal que en zonas alejadas tengan renuencia a trabajar allá, afortunadamente hasta el momento no hemos tenido este problema en el Estado de México, por ejemplo, toda la zona sur en términos de cobertura hay mucha solicitud”, destacó.
Abundó que, el programa, cuya fase de registro concluirá el próximo 15 de noviembre, proyecta incorporar a mil 600 profesionales de la salud.
En cuanto, al programa de vivienda, que contempla un registro de condiciones habitacionales en municipios como Chalco, Ecatepec y Chimalhuacán, se estima que las visitas concluirán el 15 de diciembre, así como el programa de apoyo a mujeres de entre 60 y 64 años ha alcanzado un registro de 90 mil beneficiarias, acercándose a la meta de 110 mil personas planteadas con base en el último censo del INEGI.