El equipo mexicano de natación artística volvió a participar en unos Juegos Olímpicos, la cita fue París 2024, aunque no fue de la manera que ellas esperaban.
Los nombres de Nuria Diosdado, Joana Jiménez, Samantha Rodríguez, Jessica Sobrino, Regina Alferez, Fernanda Arellado y Pamela Toscano serán recordados como las ondinas que lograron que México volviera a competir en equipo de la natación artística en una justa veraniega, hecho que no ocurría desde hace 28 años, en Atlanta 1996.
Su salida conmocionó a todos los asistentes. Esos trajes rojos las hicieron brillar en el centro acuático, desafortunadamente una penalización en su actuación las hizo recibir puntos menos y su evaluación final fue de 242.9491, terminando en octavo puesto de los 10 equipos participantes.
Las líderes de rutina técnica fueron las integrantes de China con 313.5538, España recibió 287.1475 e Italia fue el tercer mejor equipo evaluado con 277.8304.
México en esta rutina técnica subió el grado de dificultad a 39.550, al atreverse a esta situación también tenían que cumplir con lo planteado, pero un descuido en la figura final les costó no recibir la calificación que deseaban.
Toda esa energía que había en el centro acuático gracias a la música y los movimientos que realizaron las mexicanas desaparecieron al momento de esperar la calificación, fue el equipo con el que los jueces más se tardaron en dar su evaluación.
Una vez que vieron la cifra total, el equipo mexicano de natación artística tuvo una sonrisa discreta, claro que no era lo que esperaban, pero aún así se marcharon fuertes porque volverán a esta alberca para presentar su rutina libre y acrobática en los siguientes dos días donde buscarán una mejor evaluación y lograr el objetivo: “una destacada actuación en los Juegos Olímpicos”.
