Por Karina A. Rocha Priego
Ya lo habíamos comentado antes. El asunto del presunto secuestro de la adolescente rusa, de las instalaciones del Centro de Asistencia Social (CAS) “Villa Hogar” en Toluca, el pasado 28 de septiembre, puede estar abriendo una cloaca para su investigación y, de llegar al final de la misma, quedarán expuestos decenas de servidores públicos de esta y otras administraciones estatales y municipales del Estado de México.
Leímos que en la denuncia de Marina Romanova, madre de Kristina Vladimirovna Romanova, adolescente de 16 años, esta fue clara al asegurar que a su hija ¡la habían secuestrado!, peor aún, que ¡había servidores públicos involucrados en ello!.
Al final, la jovencita fue encontrada en Tijuana, Baja California, en aparente buen estado de salud y culpando de ello a un pariente cercano de la joven. Eso, sólo ella y ahora las autoridades sabrán si es verdad o no, el hecho es que, en este espacio, comentamos los fuertes rumores que desde hace años se escuchan en torno a que las niñas y adolescentes que tienen la mala suerte de caer en el Sistema DIF en el Estado de México, y puede ser que en otros estados también, corren el riesgo de ser “secuestradas” por funcionarios públicos para utilizarlas en “fiestas privadas de los políticos”.
Recordemos, también, que en innumerables ocasiones se ha denunciado la existencia de una red de pederastia compuesta por políticos retirados y en funciones, en todo el país, al grado de que hoy, estos siguen siendo nombrados por periodistas dedicadas (mujeres) a la investigación de fondo, que han puesto en riesgo su vida, pero que han tenido el valor de publicar el nombre y apellido de estos infelices políticos que se aprovechan de la vulnerabilidad de las niñas y adolescentes, huérfanas, que alberga el DIF.
Si bien es cierto que el caso de Kristina, gracias a la valentía y perseverancia de su madre, fue resuelto luego de 5 días de haber salido a la luz su desaparición, ¿cuántos casos así se imagina usted que existen? Casos donde desaparecen niñas o jovencitas bajo el resguardo del DIF que, al ser huérfanas, por supuesto que ¡no hay quien las reclame y denuncie su desaparición!, lo cual es un tema que debe ser tomado con seriedad por las autoridades, no sólo del Estado de México, sino a nivel nacional, toda vez que, si los rumores vienen desde hace varios años ya, entonces quiere decir que hay “tema de investigación para largo”.
De igual manera, se podría presumir que la desaparición de niñas y jovencitas, podría estar enfocada, no sólo en trata de personas, sino en tráfico de órganos o venta de infantes en un mercado negro que, es de todos sabido, sí existe, pero pocos, muy pocos, saben quién lidera este mercado.
No es un tema fácil de comentar, pero existe. La prueba está en la denuncia de la madre de Kristina, quien habló de secuestro y de servidores públicos. Habló de la falta de vigilancia, seriedad y respeto con la que son tratados los huérfanos de las Casas Hogar.
No sólo mujeres, también varoncitos que podrían estar corriendo los mismos riesgos.
Hay quienes dicen, somos un tanto “exagerados” en nuestras apreciaciones, sin embargo, no puede considerarse “exagerado” lo que está pasando en el entorno del Sistema DIF, en el Estado de México o, ¿es exagerado pensar que podría haber una red de pederastia conformada por políticos servidores públicos? ¿Es exagerado pensar que hay un “mercado negro” de órganos? ¿Es exagerado preguntar cuántas niñas y niños más habrán sido “separados” del resguardo del DIF?.
Es como si fuera exagerado hablar de la red de explotación de niñas y niños que obligan a trabajar en las calles para un grupo de malhechores que pagan incluso a los padres por “usar a los infantes”, pero que, con su explotación, recuperan sus ganancias a corto plazo.
No, queridos lectores, las cosas por su nombre e importancia. Para qué darle “la vuelta” a lo que es “secreto a voces”, sobre todo cuando hay niñas y adolescentes en riesgo y, tan es así que, el pasado fin de semana, se dio a conocer otro caso similar al de Kristina, pues otra adolescente de 17 años, originaria de Melchor Ocampo, también despareció desde el pasado 11 de septiembre en las mismas instalaciones y, contrario a la joven rusa, ella no ha sido localizada.
Al parecer, el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Estado de México (DIFEM) dio detalles del segundo caso de desaparición en el Centro de Asistencia Social (CAS) “Villa Hogar”, en la capital mexiquense, el cual sucedió días antes del caso de la adolescente rusa, de 16 años, pero, esta vez, se trata de una jovencita, de 17 años, de nombre María Guadalupe Rojas Cruz, de la cual, al parecer, poco caso han hecho, pues presumiblemente, esta joven fue reportada como desaparecida en tres ocasiones más por sus padres pero, al final, estarán de acuerdo que cualesquiera que hayan sido las circunstancias de las otras desapariciones, esta última debe ser un “foco rojo” para las autoridades de lo que puede estar sucediendo en el Centro de Asistencia Social (CAS) “Villa Hogar” en Toluca.
De este caso, se ha dado a conocer que el pasado 10 de septiembre, la menor de edad fue ingresada al CAS “Villa Hogar”, en Toluca, pero un día después se registró su ausencia sin aviso ni notificación y sigue sin ser localizada, por lo que, supuestamente, el DIFEM, junto con la PNNyA, colaboran con la Fiscalía mexiquense para las indagatorias correspondientes.
Por lo pronto, esta joven sigue desaparecida, no se sabe bajo qué circunstancias, y las autoridades estatales, sólo se enfocaron en cesar a personal del DIFEM donde resguardaban a la adolescente rusa en Toluca, cuando lo que se requiere es una investigación a fondo, insisto, de lo que podría estar sucediendo al interior del CAS “Villa Hogar” y el porqué las jovencitas, si no son secuestradas, buscan la “manera de escapar”.
Claro que para responder a ello, podría haber infinidad de pretextos y excusas de las autoridades pero, si se trata de niñas “abusadas” y al ser ingresadas al CAS “Villa Hogar” padecen de lo mismo, estarán de acuerdo en que, su principal interés es ¡escapar y huir de sus abusadores!, por lo que este tema debe ser ya ¡una prioridad, tanto del Gobierno Federal como del estatal!, ambas administraciones lideradas por ¡mujeres! que, por supuesto, deben entender la gravedad de los hechos y ordenar una investigación a fondo, hasta donde llegue, caiga quien caiga…