Las Fuerzas de Autodefensa de Japón (JSDF, por sus siglas en inglés) y el Ejército de EE.UU. han comenzado unos ejercicios militares conjuntos a gran escala, según un comunicado publicado por el Comando del Indo-Pacífico estadounidense.
Se trata de la nueva edición de los Keen Sword (‘Espada afilada’, en español), que tendrán lugar del 23 de octubre al 1 de noviembre en el territorio del país asiático, y cuyo objetivo es mejorar la preparación y la colaboración entre Washington y Tokio.
“Las maniobras demuestran y fomentan la interoperabilidad entre EE.UU. y Japón, validan la posición de las fuerzas y refuerzan la solidaridad de la alianza entre ambos países mediante la utilización de los equipos y procedimientos más modernos en condiciones realistas”, explica el texto.
Está previsto que aproximadamente 33.000 efectivos, cerca de una treintena de buques y unas 250 aeronaves de las JSDF participen en dichos ejercicios, mientras que del lado estadounidense habrá unos 12.000 hombres, una decena de buques y alrededor de 120 aeronaves.