En “demencial ataque armado”, derivado presuntamente por negarse a pagar derecho de piso, sicarios del crimen organizado dispararon armas largas contra establecimientos comerciales instalados a la entrada de Apaseo el Grande, Guanajuato, privando de la existencia a nueve personas, entre ellas dos bomberos y un paramédico, además de lesionar por lo menos a tres hombres más, todos ajenos a eventos delincuenciales.
La mayoría de víctimas mortales realizaba compras de diversos productos que se expenden en los comercios localizados a la entrada principal del municipio, particularmente cajeta de Celaya, alimentos y bebidas. “Fue una agresión por demás cobarde, en la que lamentablemente fallecieron personas cuyo único pecado fue encontrarse en el lugar y hora no adecuada”.
Por medio de Redes Sociales, integrantes de la organización Bomberos Veteranos de Celaya puntualizaron: “No somos parte del conflicto. No nos disparen”, luego de confirmar que en la agresión armada de Apaseo el Grande fueron asesinados Alejandro Ortega y Ulises Ramírez Vázquez, “compañeros comisionados a Bomberos Toyota, dedicados a servir a la comunidad de manera eficiente y honesta”.
“Nuestro reconocimiento a los compañeros caídos y nuestra solidaridad a sus familias”, acotaron vulcanos en activo, quienes condenaron los hechos, los que calificaron como “demenciales, cobardes y arteros”, calificativos que también utilizaron miembros del Sistema de Urgencias Médicas del Estado de Guanajuato, quienes confirmaron la muerte de Ricardo Eduardo López Ortega, destacado miembro de la dependencia.
Por lo que hace a los lesionados, se confirmó que por lo menos tres particulares más fueron ingresados a hospitales de la zona, donde son atendidos por especialistas, quienes hasta el momento no han emitido un reporte formal respecto de su estado de salud.
Personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Guanajuato, uno de los más violentos del país, se constituyeron durante la noche del último día de noviembre a efecto de iniciar la integración de la carpeta de investigación, en tanto que los presuntos responsables se encuentran prófugos.
“Lamentablemente, como siempre ocurre, autoridades de los tres niveles de gobierno prometerán que los hechos serán aclarados, que los asesinos serán detenidos, que se hará justicia, que no habrá impunidad y que se trabaja intensamente para garantizar la seguridad de los gobernados, quienes realmente están a merced de los criminales. Los daños colaterales no cuentan”, asentaron habitantes de la entidad.
