Se teme que al menos 150 personas hayan perdido la vida en una masacre en un pueblo del centro de Sudán, presuntamente perpetrada por las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), un grupo paramilitar que está en conflicto con el ejército por el control del país desde hace más de 13 meses.
Las RSF no han respondido a las acusaciones, pero afirmaron haber atacado dos posiciones del ejército. Imágenes que han circulado en redes sociales tras el ataque, muestran decenas de cuerpos envueltos en sudarios blancos, preparados para el entierro en Wad al-Nourah, estado de Gezira. Estas imágenes fueron capturadas por activistas de un comité de resistencia local, parte de una red de grupos que abogan por un retorno al gobierno civil en todo el país. El Comité de Resistencia de Madani ha declarado que está a la espera de un recuento confirmado de muertos y heridos.
Las RSF habrían atacado el pueblo en dos ocasiones, aunque las circunstancias exactas de los asesinatos aún no están claras.
Hafiz Mohamad, de la principal organización de derechos humanos Justice Africa Sudan, ha comunicado a la BBC que aún hay muchas personas desaparecidas, pero que resulta “difícil contar a todos los muertos”, debido a que “los elementos de la RSF siguen saqueando la zona”. El gobierno militar de Sudán ha instado a la comunidad internacional a condenar el ataque en Wad al-Nourah. La RSF tomó el control del estado de Gezira en diciembre, al sur de la capital, Jartum, y ha sido acusada de numerosos abusos contra civiles, acusaciones que niega.
Mientras tanto, continúan los intensos enfrentamientos entre las RSF y el ejército en El Fasher, una ciudad en Darfur, al oeste del país. Desde el inicio del conflicto en abril de 2023, se estima que más de 15 mil personas han perdido la vida en todo el país. Varios intentos de negociaciones de paz han fracasado en poner fin a la guerra, que se desató a raíz de una disputa entre los líderes del ejército y las RSF. Las agencias de la ONU advierten que los combates han provocado la mayor crisis de desplazamiento del mundo y que millones enfrentan la amenaza de la hambruna.
Martin Griffiths, subsecretario general de la ONU para asuntos humanitarios, ha advertido esta semana que hasta cinco millones de personas tienen un alto riesgo de padecer hambruna. “No creo que hayamos enfrentado una situación de este tipo antes”, declaró, añadiendo que “este conflicto era evitable”. “Es el resultado de dos hombres que decidieron resolver sus diferencias mediante la violencia, llevando a su país a la ruina”, concluyó Griffiths.
Ante esta situación, el líder del Ejército de Sudán, Abdelfatah al Burhan, prometió el día de ayer, una “dura respuesta” a la masacre cometida presuntamente a manos del grupo paramilitar.