Al pedirle que no lo mande “a La Chingada” antes de tiempo, el presidente Andrés Manuel López Obrador le recordó a su amigo Donald Trump que él es titular del Ejecutivo mexicano hasta el 30 de septiembre.
López Obrador leyó la carta que le envío al candidato republicano a la Presidencia de EU en la que la “aclara” cuestiones relacionadas a la migración y el cierre de la frontera, y le puntualiza 2 temas por “aquello de los asesores”:
“Le mando un abrazo y le deseo lo mejor -ya ven que eso de los asesores- posdata: oiga todavía soy Presidente de México, porque es que dijo que ya no estaba yo. Termino hasta finales de septiembre, le aclaro, porque hace unos días comentó que ya me había retirado, por favor amigo, no me mande, no me ande mandando a la chingada antes de tiempo, aunque se ría y siempre le parezca extraño ahí le va de nuevo otro abrazo”.
En la carta fechada el 23 de julio, López Obrador le recuerda a Trump, ante sus acusaciones de que los migrantes son “invasores” y “maleantes” el discurso que dio tras la firma del T-MEC el 8 de julio de 2020, en la Casa Blanca desde donde dijo que a México y EU:
“Nos une el comercio, la historia, la familia, la fe. Estados Unidos alberga a 36 millones de ciudadanos méxico-estadounidenses que fortalecen nuestras iglesias, nuestras comunidades y colorean todos los trazos de la vida de nuestra nación. Además, son grandes hombres y mujeres comerciantes. Ellos conforman, se estaba repitiendo a nuestros paisanos, un gran porcentaje de los negocios. Son sumamente exitosos, grandes negociantes, grandes personas y seres honorables”.
Y con respecto al cierre de la frontera, el mandatario mexicano le advirtió a su amigo el presidente Trump -al que se refiere así porque en EU siempre se le dice así pese a que ya pasó su mandato, no como en México- que de hacerlo:
“Sería equivalente a convocar a una rebelión en ambos lados de la frontera por los daños que causaría a los pueblos, a la industria y al comercio”.
Lo que afectaría a ambas naciones, en particular a las entidades norteamericanas de California, Arizona, Nuevo México y Texas, y 6 estados fronterizos de México, los cuales, juntos:
“Representan la cuarta economía mundial. Pero creo que dicha decisión impediría el cruce de las aduanas y los puentes fronterizos a un millón de personas y a 300 mil vehículos, de los cuales 70 mil transportan mercancías de un país a otro, que diariamente transitan por la línea divisoria en ambas direcciones”.
De igual manera, el mandatario saliente se dice despreocupado de la retórica que se utiliza en esta época electoral en EU, pues él –López Obrador- cree que Trump sólo está en campaña y no es “un obcecado”.
Durante la Convención Republicana el empresario arremetió contra los migrantes al tildarlo de todos los males de su nación, en particular la violencia y la muerte por drogas; días después presumió que en su primer paso por la Oficina Oval, durante las negociaciones del T-MEC, él logró que “México le diera todo lo que quería” como desplegar 28 mil soldados en las fronteras.