El primer ministro de Francia, Michel Barnier, presentó este jueves al presidente del país, Emmanuel Macron, la dimisión de su Gobierno tras el histórico voto de censura por las disputas presupuestarias, que lo obligó a renunciar a su cargo junto con los miembros de su gabinete. El mandatario la ha aceptado, informan medios locales.
Macron ha solicitado tanto a Barnier como a su Gobierno que permanezcan en funciones hasta que se nombre a un nuevo primer ministro, informa la agencia Reuters citando un comunicado emitido este jueves por el Palacio del Elíseo.
El presidente galo puede nombrar a un nuevo primer ministro, designar a Barnier como líder de una administración interina o bien erigir un gobierno tecnocrático, con un grupo de expertos, hasta que se celebren nuevas elecciones, en julio de 2025.
Según fuentes del Elíseo, Macron nombrará pronto a un nuevo primer ministro. Estas personas señalan que podría hacerlo antes del sábado, cuando se llevará a cabo la reapertura de la catedral de Notre Dame de París con invitados como el presidente electo de EE.UU., Donald Trump.
Marine Tondelier, líder de Los Ecologistas, ha enviado una misiva a Macron para pedirle que nombre como sucesor de Barnier a “una personalidad de izquierdas y ecologista”, mientras que la formación Francia Insumisa ha advertido de que censurará “automáticamente” a cualquier primer ministro que no provenga de la coalición Nuevo Frente Popular. Por su parte, Marine Le Pen, líder de la ultraderecha, ha afirmado que una reestructuración del Ejecutivo tiene pocas posibilidades de éxito a largo plazo.
De acuerdo con la Constitución francesa, el mandato de Macron se extiende hasta la primavera de 2027, pero la oposición ha exigido que dimita para asumir la responsabilidad de la crisis política en la que se halla sumido el país europeo.