La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) envió a Michoacán más refuerzos para ayudar con las labores de seguridad, según lo informó a través de un comunicado. De acuerdo con el escrito difundido por la 43/a Zona Militar de la Sedena, arribaron 300 elementos del Ejército Mexicano a la región de Tierra Caliente para integrarse a la Estrategia de Seguridad Nacional de la nueva administración.
El objetivo, asegura, es inhibir las actividades de los grupos delictivos en el ciclo productivo del limón, en los municipios michoacanos de Apatzingán, Buenavista Tomatlán, Múgica, Parácuaro, Tepalcatepec y Aguililla.
Lo que se pretende es blindar las etapas del proceso de producción de limón, el cual suele ser condicionado por el crimen organizado a extorsiones. “Con estas acciones se logrará dar orden y seguimiento a la producción del limón, aspectos que fortalecerán al gremio limonero y evitará que la delincuencia organizada tenga injerencia y/o control de algún proceso en las fases de producción, empacamiento, transportación y comercialización”, asegura.
Sedena destaca que en estas labores participarán además elementos de la Guardia Nacional, Fiscalía General de la República, Centro Nacional de Inteligencia, Fiscalía General del Estado, Secretaría de Gobernación, Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del Estado y Comité Nacional del Sistema Producto Limón Mexicano.
“De esta manera, el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional reafirman la indeclinable decisión del Gobierno Federal por detener las actividades de la delincuencia organizada, refrendando su compromiso de velar y salvaguardar el bienestar de los ciudadanos, para garantizar la paz y seguridad de la población de la Región de Tierra Caliente en el Estado de Michoacán”.
Durante este año, el costo de este alimento, esencial en la cocina mexicana, se disparó casi un 200 por ciento, generando desconcierto y enojo no sólo en los consumidores, sino también en los agricultores, los cuales se vieron obligados a encarecer su producto por los factores medioambientales y, principalmente, de seguridad, que amenazaba su trabajo.
En agosto de este año, los productores de limón del estado de Michoacán anunciaron un paro de labores, debido al cobro de cuotas y amenazas que recibieron por parte de al menos a tres cárteles del narcotráfico.
En este contexto, la ahora presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, señaló también en agosto que existe una iniciativa en la Cámara de Diputados para que en el artículo 19 Constitucional se considere la extorsión como delito grave y con prisión preventiva oficiosa.
Además, afirmó que debe crearse una “estrategia en particular” para combatirlo, la cual no sólo deberá enfocarse en implementar mayor seguridad en las zonas de riesgo, sino en trabajos de inteligencia e investigación que permitan la detención de sus infractores.