ESPECTÁCULOS

Ni Liam Neeson se libró de vivir el placer infantil de “Star Wars”

Spread the love

El buen recuerdo de Liam Neeson de su paso por Star Wars se ha ido difuminando con el tiempo. El actor, que debutó en la franquicia de George Lucas interpretando al maestro jedi Qui-Gon Jinn en La amenaza fantasma, retomó su papel con un pequeño cameo en la serie de Obi Wan-Kenobi el pasado 2022.

Sin embargo, aunque su regreso pudiera entenderse como indicativo de un cariño sin igual hacia los fans y esta galaxia muy muy lejana, lo cierto es que sus opiniones sobre este universo están lejos de ser fabulosas.

Neeson habló de cómo cree que Star Wars ha quedado sepultada entre tanta secuela y spin-off, lo que cree que dificulta el seguir una línea narrativa clara. En este sentido, admite que a título personal se siente muy desconectado de este universo, lo que se vuelve un estorbo cuando los fans le abordan para hablarle de su trabajo como Qui-Gon Jinn o para pedirle autógrafos, cosa que ya de por sí le resulta costoso de hacer fuera de su rutina laboral.

Neeson eleva esta queja a otro nivel, puesto que, aunque le resulta entendible en el caso de los más pequeños, le sorprende que sean padres y abuelos quienes se dirigen a él dando rienda suelta al niño y fan interior que llevan dentro. “Hay tantas películas y spin-offs ahora que creo que se está diluyendo todo. Eso es algo personal. De vez en cuando hay niños que buscan un autógrafo de Star Wars y yo no quiero dar autógrafos en el aeropuerto. Ah, pero no es el niño, es el abuelo, ahí está él… o el papá. Se convierten en niños de 11 años”.

En este sentido, las palabras de Neeson sobre el devenir de Star Wars y la pérdida de ilusión de la franquicia se quedan algo cojas, porque, aunque sí es verdad que la saga está languideciendo por extenderse en infinidad de productos de todo tipo, queda claro que la pasión galáctica que siempre transmitieron estas películas nunca se ha ido. Y es que, como bien cierra el actor en sus declaraciones, aun estamos ante una saga capaz de hacernos sacar el niño que llevábamos dentro y soñar con las muchas virtudes de estas aventuras espaciales.

Porque el propio Neeson reconoce en la misma entrevista que él mismo acabó sintiéndose como un niño en el patio del colegio mientras trabajaba con Ewan McGregor en La amenaza fantasma. Y no fue una pequeña anécdota que pasara desapercibida, porque llevó a George Lucas a tener que llamar la atención a ambos actores por estar retrasando las grabaciones con sus juegos de niños.

En dicha intervención, donde habló de su aparición en Obi-Wan Kenobi, también reconoció que las muchas secuelas y spin-offs habían “quitado el misterio y la magia” a Star Wars, pero no dudó en hablar del disfrute que vivió en su salto al universo galáctico y de lo bien que congenió con McGregor, resaltando cómo vivieron su primera vez con los sables láser. Porque en cuanto tuvieron las armas jedi en sus manos, se pusieron a jugar y a tratar de imitar los ruidos del movimiento de las espadas, lo que Lucas, desde un tono bromista, tuvo que cortar para poder seguir con la producción.

“La primera vez que tuvimos que usar el sable de luz para iniciar una pequeña pelea… Ambos automáticamente, gritaron ‘¡acción!’ e hicimos los ruidos”, recordaba Neeson imitando el sonido de los sables en movimiento de las películas. “George dijo: ‘Paremos esto, chicos, podemos agregar eso más tarde’”.

“Claro, ya lo sabíamos”, asegura Neeson que le respondieron intentando salir del bochornoso momento. “Idiotas”, se autodefinía el actor recordando la anécdota entre risas.

No obstante, aunque se trate de una historia entrañable, el comportamiento que Neeson señala en los fans que le piden autógrafos, convirtiéndose en niños fanáticos delante suyo, fue una experiencia que él mismo experimentó en sus carnes imitando los ruidos que tantas generaciones emitieron cuando jugaban (o juegan) a ser jedi. Y en eso no existe edad que valga…

El sentido del espectáculo y la maravilla que arrastra la saga de George Lucas, que nos dejó uno de los universos más refrescantes y memorables del séptimo arte, siempre nos incentivó a soñar, a vivir aventuras, a explorar los confines del espacio y, en definitiva, a sacar el niño que todos tenemos dentro. Y esto no entiende de edades. Y aunque hoy Star Wars pueda tener un rumbo criticable, las palabras de Neeson ampliando sus juicios a las implicaciones de su fenómeno fan se sienten desacertadas, sobre todo valorando que él mismo también se ha dejado llevar por estas sensaciones el primer día que tuvo un sable de luz en sus manos.


Spread the love

Similar Posts

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *