Irene Espinosa Cantellano, subgobernadora del Banco de México (Banxico), advirtió que una reducción “prematura” puede poner en riesgo la reducción de la inflación en México, esto refiriéndose al recorte a la tasa de interés, decisión que Espinosa rechazó tajantemente.
“La inflación general aún se encuentra lejos del objetivo, el balance de riesgos para nuestros pronósticos de inflación se mantiene sesgado al alza”, aseveró. Indicó también que las predicciones del mercado, acerca del nivel de inflación en este año fueron calculados ‘al alza’, por tal motivo determinó que es “prematuro iniciar la reducción de la restricción monetaria”.
“Hacerlo pondría en riesgo la convergencia y, con ello, la credibilidad sobre el compromiso de este instituto central con su mandato prioritario de la estabilidad de precios”, añadió.
Banxico aprobó recortar la tasa de interés, estableciéndola en 11 %. No obstante, en últimos reportes de la institución, descartan nuevas reducciones en siguientes procesos.
“La Junta de Gobierno vigilará estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas. En las siguientes reuniones, tomará sus decisiones en función de la información disponible”, detallaron.
Victoria Rodríguez, gobernadora de Banxico, declaró que dicha medida, no debía ser vista como la primera de muchas reducciones: “La inflación ha bajado de forma importante, pero necesitamos ser cautelosos. Cuando se den los ajustes a la baja, estamos previendo que serían graduales”, añadió.
La Junta de Gobierno de Banxico, intentó dejar en claro que los ajustes en dicho referencial se harían de manera gradual, además de descartar que Banxico mantenga una “actitud de complacencia” en cuanto a sus estrategias en contra de la inflación.
La Junta de Gobierno, atribuyó el comportamiento del peso contra el dólar al diferencial entre la tasa del Banxico y la de la Reserva Federal que es de 5.25-5.5 por ciento.
También consideraron “los sólidos fundamentos macroeconómicos del país en relación con los de otras economías emergentes.
“La reducción en la volatilidad cambiaria y el sesgo implícito en las opciones sugieren una menor demanda por cobertura ante una eventual depreciación del peso que contrasta con lo observado en otros años electorales”, agregó la institución.
