Marte es un planeta de gran misterio que desde hace años es investigado por expertos. Además, el 4 de julio de 1997, la NASA decidió dejar en este lugar un objeto que ha permanecido inmóvil desde hace 26 años. Nos referimos a un vehículo robotizado que perteneció a la misión Mars Pathfinder.
Esta unidad robotizada, el Sojourner, fue lanzado el 4 de diciembre de 1996, a bordo de un cohete Delta. Un mes después y tras la culminación de la misión Mars Pathfinder, se dejó sobre la superficie del llamado planeta rojo, con el objetivo de analizar la atmósfera, el clima y la geología de Marte.
Además, gracias a esta misión y al Sojourner, los expertos pudieron obtener más de 16 mil 500 imágenes de Marte, así como 8.5 millones de mediciones de la presión atmosférica, temperatura y velocidad del viento.
Para llevar a cabo la misión y no dañar a este peculiar robot, la NASA tuvo que usar un escudo de protección térmica u un gran paracaídas, así como un radar de altímetro que sirvió para que el aterrizaje del vehículo fuese lo menos brusco posible. Incluso, durante su descenso, utilizaron 24 bolsas de aire que se abrieron ocho segundos antes del impacto.
Cabe mencionar que el vehículo descendiendo a una velocidad de impacto de 10.6 metros por segundo, proceso que se completó en cuatro minutos, de acuerdo con la NASA.
Tras ubicarlo en la superficie, las bolsas de aire se desinflaron, dejando en un punto fijo el vehículo robótico que analizó todo a su paso. Sin embargo, la última señal del rover fue recibida el 7 de octubre de 1997; desde ese entonces, permanece abandonado en Marte sin recibir algún mérito de todo el trabajo que hizo para los expertos.
Algo que es importante mencionar es que el ser humano todavía no llega a Marte y por ello obtiene imágenes de su superficie mediante aparatos especializados. Sin embargo, esto podría dejar de ser un sueño para la NASA, ya que se prevé que el humano llegue a este planeta en 2040.
No obstante, también existe la probabilidad de que esto se adelante gracias a la avanzada tecnología que están desarrollando y que permite a los astronautas el viajar en mejores condiciones al espacio exterior. Y no solo hacia Marte, sino también a la Luna.
