Indignación y descontento; esto ha causado en gran parte de la sociedad mexicana los nuevos “apoyos” que el Gobierno Federal otorgará, a por lo menos nueve mil venezolanos quienes radican en aquel país. Esta entrega de apoyos directos, constará de los depósitos mensuales a los venezolanos de 117 y 146 dólares a aquellos quienes estén inscritos en programas sociales. Con una tarjeta informativa, la Cancillería dio detalles acerca de estos.
Uno de los programas mediante el cual se entregarán recursos es el llamado “Juntos por el Bienestar”, equivalente a “Jóvenes Construyendo el Futuro”, con el que México beneficiará a 5 mil venezolanos. La dependencia explicó que durante un periodo de seis meses cada beneficiario contará con un apoyo económico de 146 dólares mensuales.
Es innegable el repudio que invade a muchos compatriotas al saber que los recursos públicos; dinero que sale del bolsillo de los contribuyentes, dinero que bien podría ser invertido en las acciones necesarias para terminar con la crisis hídrica que afecta a la nación, terminarán en la bolsa de ciudadanos venezolanos, quienes con el solo hecho de salir de su país y llegar al nuestro, ahora merecen lo que le corresponde a los mexicanos.
A través de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), el gobierno informó que también asumiría los costos de apoyar a cerca de cuatro mil venezolanos con el programa “Sembrando Vida”. A cada campesino se le otorgará un apoyo económico, el cual consiste en un depósito mensual de 117 dólares hasta por 8 meses.
La implementación de estos programas en Venezuela serían efectos de la Carta de Intención en Materia de Cooperación Bilateral, la cual fue firmada por las cancillerías de ambos países el 1 de marzo, en una reunión en la que nuestra canciller, Alicia Bárcena, no supo hacer otra cosa más que seguir al pie de la letra las órdenes del dictador venezolano Nicolás Maduro, inclinándose hacia él y dándole un gran abrazo tras firmar la carta compromiso.
Con “Juntos por el Bienestar” se brindará capacitación para mejorar la empleabilidad. La cancillería ya se reunió con bancos, asociaciones y empresas de Venezuela, para identificar espacios para que los beneficiarios adquieran habilidades técnicas.
Ahora bien, con el programa “Sembrando Vida”, lo que México busca es contribuir con el incremento en la productividad de agricultores venezolanos y de sus familias, así como fomentar la implementación de sistemas de producción agrícola y fortalecer su desarrollo.
En particular, este programa es el que más ha causado indignación, pues México tiene un campo lastimado por todos los años en los que ha sido abandonado por el Estado; que no tiene defensa alguna contra los grupos delictivos que merman ganancias y matan negocios con el cobro del ‘derecho de piso’, y que ahora, escuchan de viva voz de su gobierno, que no se gastará ni en ellos ni en saciar las necesidades de sus poblaciones, sino que, se velará por el bienestar de extranjeros, y lo peor, en su propio país.
Más de 95 millones de dólares ha entregado el gobierno mexicano en programas sociales implementados en Belice, Cuba, El Salvador, Guatemala y Honduras. La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que ha beneficiado a más de 61 mil personas inscritas en los programas “Sembrando Vida” y “Jóvenes Construyendo el Futuro”.
Subrayó que el impulso de proyectos de cooperación en América Latina y el Caribe busca atender la migración irregular y generar oportunidades de desarrollo.
La entrega de apoyos en dichos países forma parte de la denominada Estrategia mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo. Y con respecto a los recursos de la Amexcid para ejecutar dichos proyectos, estos gastos están estipulados en la Ley de Cooperación Internacional para el Desarrollo y en el Programa Sectorial de la SRE.
